Repasar de manera eficiente.

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Repasar de manera eficiente.

Repasar es la clave imprescindible para seguir avanzando en el estudio.

Con el paso del tiempo vamos eliminando la información de todo aquello que tanto costo estudiar.

Repasar consiste en releer lo estudiado con anterioridad para consolidar y reforzar los conocimientos.

Cuando repasamos, estamos reforzando las conexiones neuronales que utilizamos en el aprendizaje previo. Para entenderlo mejor vamos a hablar de la curva del olvido.

La curva del olvido, no es otra cosa, que el tiempo que va a transcurrir desde que aprendemos algo hasta que se desvanece. La teoría fue desarrollada por el psicólogo Hermann Ebbingaus en 1885. El planteó que la mayoría de la información se quedaba en la memoria a corto plazo y que al poco tiempo se olvidaba. Demostró que solo el 44% de los datos eran recordado unas horas después, que después de un día, el 33% y al cabo de una semana, el 25% de la información estudiada. Descubrió, que repasar aumentaba exponencialmente la capacidad del estudiante al memorizar ya que con cada repaso se mejoraba la retentiva de datos.

Para efectuar un repaso eficiente, tenemos que tener muy claros los conceptos y la información importante y poner en un segundo lugar lo menos relevante.

Para ayudarnos a repasar y una vez tengamos claro lo realmente importante, nos ayudaremos de resúmenes, mapas mentales, esquemas…

La forma de repasar es muy personal ya que nadie mejor que tu para saber que es lo que te funcionan, pero si podemos darte algunos consejos por si los quieres ponen en práctica.

• ¿Quién de pequeño. no ha jugado a ser profesor y dar clase a sus peluches, muñecos o juguetes? Si, no es una broma, es un buen método de repaso para trabajar la memoria auditiva. Hazlo en voz alta y explica lo estudiado.
• Reproduce la información siguiendo punto por punto todas las anotaciones y apuntes que tengas. Después anota los apartados que más te cuesten para trabajarlos en el repaso.
• Relee lo ya estudiado de forma activa, a ser posible en voz alta y con ejemplos.
• Si tienes posibilidad, busca exámenes de años anteriores para poder autoevaluarte y así saber que debes repasar más. Si no los encuentras, puede confeccionarte tu mismo las preguntas y las respuestas, al repasarlas te serán de gran ayuda de cara al examen.
• Otra forma de repasar y más divertida, es con flashcards.  Como ya conocerás, consiste en escribir preguntas con conceptos relevantes y en el reverso de la tarjeta la solución.

Partimos de la base, que, para estudiar, tenemos que tener una planificación con un calendario bien organizado, en el cual incluiremos el tiempo destinado al repaso.

Para ello, vamos a clasificar los repasos en tres tipos:

• Inicial: Lo haremos cada vez que terminemos un tema. Lo tenemos reciente y podremos asimilar mejor la información.
• Intermedio: Tenemos que planificar repasos en cada trimestre de dos a tres veces, de esta forma reforzaremos el recuerdo de lo estudiado. Son los más importantes y por lo tanto no te puede quedar ninguna duda de lo aprendido y poder memorizar todo para el día del examen ya que serán recuerdos a largo plazo.
• Finales: Los solemos hacer unos días antes del examen, ya no existen dudas y podemos presentarnos al mismo, convencidos de nuestros conocimientos.

También es conveniente utilizar el repaso de arrastre. Consiste en acumular progresivamente la materia que debes repasar. Por ejemplo; empezamos la semana en el tema número uno y la repasaremos. A la semana siguiente el tema dos y repasamos el tema uno y dos, así sucesivamente. Así tendrás asegurados los conocimientos de toda la materia.

Nada más que añadir, solo nos queda daros ánimos y que se cumplan vuestros objetivos.

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En sección Rincón de la lectura - Sección del estudiante por Revistamujer.es

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