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Por regla general invertimos tiempo y dinero en nuestro maquillaje para sentirnos bien y a gusto con nosotros, pero no invertimos el mismo tiempo en nuestras brochas, esas que hacen que nuestro maquillaje quede perfecto.
Tenemos que tener en cuenta que, para conseguir ese maquillaje, las brochas deben estar en perfecto estado ya que es fundamental. También hay que tener en cuenta que están en contacto directo con nuestra piel y por tanto si no tienen la higiene adecuada podríamos coger alguna infección. Si, es verdad, no nos vamos a engañar, que limpiarlas nos llevará un tiempo, pero un tiempo necesario.
Tendremos a mano una pastilla de jabón neutro, un jabón hidratante o cualquier otro producto que no sea abrasivo.
Mojaremos las brochas en agua desde la base hasta la punta, de esta manera, evitaremos que se estropee el mango. Añadiremos unas gotas de jabón o frotaremos en la pastilla, dependiendo de la adquisición del jabón. Con la ayuda de nuestras manos, frotaremos sobre la palma de nuestra mano haciendo movimientos circulares. Después, aclararemos bien bajo el grifo para quitarles todos los restos de jabón. Cuando el agua salga totalmente limpia, nuestra brocha estará reluciente. La dejaremos en horizontal sobre papel absorbente y dejaremos que se seque por completo.
Algunas veces, al utilizar productos en crema, no conseguimos que la brocha quede completamente limpia. Para ello utilizaremos aceite de oliva. La forma de limpiarlas es poner unas gotas de aceite de oliva en la palma de nuestra mano y con la brocha hacemos movimientos en círculos por unos instantes. A continuación, haremos el lavado con jabón igual que en el paso anterior y dejaremos secar de la misma manera.
Podemos encontrar en el mercado recipientes para limpiar brochas que suelen ser de silicona y con ranuras para hacer fricción y limpiarlas, pero tendremos que pasar por el paso de aclararlas, así que eso la a vuestra elección.
También venden soporte para dejar secar las brochas y esto, si que es realmente útil ya que las dejaremos secar boca a bajo sin contacto con la superficie y se evita que entre agua en el mango a la vez que seca correctamente por todos los lados del pelo.
Nuestra recomendación es limpiar las brochas y pinceles una vez a la semana, máximo a cada quince días, recuerda que es importante para nuestra salud y para vernos guapos.
¿Tenéis algún truquito más?, pues venga…
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En sección Belleza por Revistamujer.es
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